Mañana fría en la
que 8 amigos de la bici desafían las heladas para soltar las piernas después de
Reyes. Decido hacer una ruta sencilla que se inicia por el Suspiro del Moro,
pasando por el camino de Motril en el término de Padul, hasta Cozvíjar. Desde
donde descendemos en una vereda, por las casas del Pasarín, alcanzando la Granja Escuela El
Molino a orillas del Río Durcal. Siguiendo
por las hazas heladas de su ribera llegamos a un punto en el que decimos
dar la vuelta pues había que cruzarlo sin puente, el caudal era abundante y el
piso resbaladizo. Dada la media vuelta ascendemos por la Cuesta la Valdesa hasta la carretera
de entrada al pueblo y rodeando por las afueras del pueblo llegamos hasta El
Picón, donde circulamos junto a la autovía de la playa para bajar por el
barranco del Baño hacía los llamados Baños de Urquízar, que se encuentran en lo
más profundo del término municipal de Dúrcal junto al cauce del Río, en otro
tramo de este distinto al que pasamos anteriormente, en el limite con el
municipio de Villamena, con el pueblo de Cónchar al fondo. Son unos manantiales
de aguas mineromedicinales también conocidos con el nombre de “Vacamía” ya que
según una leyenda los moriscos enterraron en el paraje un becerro de oro al
aproximarse la reconquista para evitar que cayera en manos cristianas. Hay dos
albercas para poder bañarse y tomar el agua, de magnificas propiedades
curativas para la piel. El agua es potable y sale del interior de la tierra a
una temperatura templada de unos 25 grados. Después de visitar esta preciosa
zona nos vamos hacía Durcal mas concretamente a la Ermita de San Blas,
construida a finales del siglo XVIII a las afueras del pueblo en el camino Real
o Camino de Herradura que iba de Granada a la Alpujarra por eso tiene
su portal dirigido por donde pasaba dicho camino. Mas tarde en el siglo XIX en
tiempos de Isabel II de decidió que la nueva carretera pasara por la parte da
atrás para poder hacerla mas ancha facilitando el paso de carruajes. Después de
cruzar el centro del pueblo atravesamos el Puente de Lata y rumbo a una Ermita
que habíamos visto a la ida, resultando ser la Ermita de la Virgen de La Cabeza de Cozvíjar del
siglo XVI, se levanta a las afueras de la población, y según la tradición, la
ermita se construyó en el lugar donde un agricultor encontró la cabeza de una
imagen de la Virgen
a la que luego se le hizo un cuerpo. La Virgen de la Cabeza actualmente se encuentra en la iglesia de
San Pedro, y su puesto ha sido ocupado por la Virgen de Lourdes. A partir de aquí rumbo al
Hornillo a tomarnos unas birras que nos invita nuestro amigo Pedro por ser su
cumpleaños hace poco.(A. Marín)
MAPA DE LA RUTA: AQUI
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